“Hazte amigo de tu pasado y del pasado de los demás”, dice
Lauren Ruth, y me parece una frase poderosa para promocionar esta canción, pues
cuando aceptamos lo que alguna vez fuimos es cuando podemos ir hacia adelante.
Así es como este tema se nos presenta como una balada con un tono melódico en
donde la guitarra es la que toma la batuta de la pista principal, luego la
batería va marcando ese ritmo melódico. Y finalmente, tenemos un ambiente
cargado de emoción y sentimiento, al igual que la voz de Lauren.
Ella canta con cierto tono melódico que suena dulce y
delicado, como si acariciara cada frase antes de cantarla. Cuando su voz se
queda por encima de la guitarra melódica, logran crear un puente sonoro hermoso,
que nos lleva a unas notas más profundas cerca del minuto 4, cuando el ambiente
adquiere cierta densidad que se ve rota por la voz en eco de Lauren.
¡Lauren Ruth nos invita a reconciliarnos con el pasado en
una balada melódica y emotiva!
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