Lucky se entiende como una confesión envuelta en ironía, dicha con una sonrisa torcida, la cual esconde más de lo que muestra. En esta delicada pieza de indie folk pop, M Rosenbaum nos abre la puerta a uno de sus rincones personales, de esos en donde uno se encierra por elección, aunque secretamente anhele lo contrario. La letra juega con el contraste que se hace entre la fortuna de ser amado y el auto sabotaje de rechazar esa fortuna por miedo, rutina o la simple costumbre emocional.
Con acorde suaves, una voz íntima y un humor sutil que lo único que busca es comprensión, esta canción avanza con nosotros como si estuviéramos en una plática a voz baja, de esas que solo se tienen en la intimidad y con el alma entreabierta. Hay máscaras, sí, al igual que fachadas, pero todo se esconde detrás de una calidez melancólica que convierte lo cotidiano en algo poético.
Es una canción que no se toma a sí misma demasiado en serio, pero no hay problema, porque eso es lo que la vuelve mágica. Además de que nos deja con el conocimiento de que a veces, reconocer nuestro auto sabotaje con algo de gracia, es el primer paso para deshacernos de nuestro disfraz.
Sí te gusta nuestro contenido síguenos a través del siguiente botón ↓↓↓↓
0 Comments