Fried es una canción que nos presenta a la neopsicodelia y a un espíritu noventero ideal para cuando queramos que nuestras noches no tengan final. Es una de esas piezas que capturan un momento específico en el tiempo: la rara euforia que aparece en la madrugada, cuando el cuerpo está cansado pero nuestra mente no puede parar. Con una vibra juguetona y psicodélica, el tema combina la crudeza del rock alternativo de los 90's con una producción que a través de sonidos vibrantes nos sitúa en el presente.
Este track se dedica desde el inicio a transmitirnos esa sensación de compartir una madrugada con personas que igual quieren pasar un buen rato. Las guitarras tienen una textura sucia e hipnótica, en donde los ritmos bailables impulsan a nuestro cuerpo sin esfuerzo mientras que las entregas vocales nos hacen sentir como si estuviésemos flotando entre el delirio y la risa.
Prepárate para escuchar una canción auténtica que celebra de manera amable el caos que sucede cuando la lógica ya no importa y lo único que nos queda es dejarnos llevar.
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