Es increíblemente refrescante y emocionante encontrar una canción (y artista) que sientas que te hace una invitación honesta a sentir sin filtros ni juicios, y Reina Victoria con Pretty Little Thing nos hace sentir eso y más. ¡Recuerda que la música también sirve para sanar, soltar y aceptar la realidad!
Con una vibra totalmente basada en el electro pop alternativo, se pueden notar tintes oscuros a través de sintetizadores profundos, ritmos minimalistas y texturas electrizantes y densas que forman una atmósfera ideal para la introspección. Hay un loop rítmico constante y cuidadosamente se va integrando para no saturar tanto a la pista como al oyente, para que así éste último pueda apreciar los suspiros de cada elemento sonoro.
Algo de admirar de ésta entrega, sin duda es la capacidad que tuvo para transformar la melancolía en algo con lo que podemos movernos, y sobre todo disfrutar; se siente como si no sólo se hablara del amor y la autenticidad, sino que lo exige y ofrece a través del ritmo.
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