Lo que me llama la atención de esta canción es la unión de fuerzas que proporciona el R&B y el trap, pues siendo géneros opuestos logran encontrar un sentido de comunión en esta canción. Se siente la dureza y el sonido callejero típico del Trap, con esas notas que van marcando el ritmo como en un latido que resuena. Y luego está la voz, el intérprete habla como si estuviera relatando una historia, por supuesto que no deja del lado el tema de la velocidad, aún así, logra transmitir sensibilidad y crea un ambiente íntimo con el escucha.
Además, la canción suena como el perfecto soundtrack de una
película, logra capturar a la perfección el ambiente de un barrio con su
sonoridad y la forma en que se mueve la voz. El sonido lo puedo describir en
una forma más general como honesto, orgánico y que, de alguna forma, logra
tocar fibras, aunque quieras hacerte dl duro.
¡Una fusión de géneros que funciona bien!
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