En el punto de cruce del folk y el punk, donde la ternura acústica se encuentra con la rabia política, Saint Nick the Lesser nos presenta God Bless, una canción que desarma con ironía cualquier noción romántica de seguridad nacional. De primera escucha, podría incluso parecer una oración agradecida, pero no tarda en revelar sus verdaderas garras: es una crítica aguda a la vigilancia masiva y al control que se disfraza de protección.
La estética del estilo, se refleja en su estructura sencilla y una voz cercana, lo cual contrasta con letras llenas de sarcasmo, como: "They protect our rights just like cancer saves our lives” o “We’re the freest jail I know, man", con lo cual se dispara directo y en contra la hipocresía del gobierno, que varias veces, en nombre de la seguridad, invaden la privacidad y nos quitan libertades.
Es un tema que busca sacudir, despertarnos. Es un himno incómodo pero necesario para esta era donde muchas cosas ya no son distópicas, sino reales. Aquí se logra cantar verdades incómodas con sonrisa irónica, guitarras honestas y una buena base de folk punk.
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