Con Nice Girls, Alex Born To Be Wild le hace honor a su nombre artístico y lanza un auténtico grito de guerra en formato pop punk, directo, furioso y sin filtros. Este no solo es un tema de protesta, también es una declaración de independencia con distorsión, actitud rebelde y una energía que te sacudirá desde el primer acorde.
La canción desmantela los mandatos del género con una honestidad brutal. “Fuck being a nice girl / Fuck patriarchy” representa más que un estribillo, es el núcleo de un mensaje que arde. Alex se rebela contra la docilidad impuesta, ante el rol de "esposa ideal", la sumisión silenciosa y lo hace con una voz cruda y directa, que es sostenida por una producción grunge, que emana liberación extrema.
Inspirada por la fuerza de los movimientos de feminismo y grupos vulnerables, esta canción reivindica el derecho a ser ruidosa, libre y disruptivamente incómoda para el sistema. Es un himno para todas aquellas que ya no estamos dispuestas a pedir permiso para existir. Súbele el volumen y grítala, sin importar lo que los demás te digan.
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