Estamos ante una propuesta musical que es una mezcla sorprendente del indie folk y pop rock que se apega por completo a la vibra californiana clásica que sin lugar a dudas, te transportará a un espacio en donde se siente que el tiempo pasa más lento, el sol siempre está presente y no hay filtros ni juicios para las emociones.
Entrelazando guitarras acústicas, armonías suaves y una producción enteramente cálida, ésta composición emana sin tanto esfuerzo ese ya característico ambiente lleno de frescura y despreocupación del pop/rock americano. Es casi como si con los primeros acordes y notas, se abriera una ventana en una mañana veraniega en la que la brisa y el viento abrasador envuelve a cada uno de los afortunados que escuchen la canción.
Ideal para un viaje en carretera mientras ocurre un atardecer impactante, para sentir emociones simples pero profundas. Se forma un paisaje sonoro cálido en donde lo único que hay que hacer es dejarse llevar, seguros y felices de que nos encontramos exactamente donde debemos estar.
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