Estás a punto de adentrarte en un viaje emocional entre acordes de piano, una suavidad angelical y una fuerza sentimental que te hará sentir que estás tocando el cielo. Sacándonos de un panorama musical en donde muchas veces se satura de estímulos, ésta canción aparece como un respiro y descanso necesario.
Es una pieza indie contemporánea que nos invita a dar una pausa para mirar hacia nuestros adentros con una serenidad casi celestial. Es una entrega suave pero intensa y emocionalmente poderosa, con una producción rica en matices altamente delicados, con lazos sutiles que hacen sentir que cada palabra estuviese flotando en el aire. Así mismo, el piano es el que se encarga de guiar esta experiencia musical por una base clara pero maleable, en donde cada factor sonoro tiene un propósito e incluso los sonidos son necesarios para completar esta canción.
Todas las emociones se sostienen con elegancia y con la vulnerabilidad necesaria para que nosotros como público podamos conectar corazón con corazón mientras escuchamos esta canción, ya sea en una bocina a todo volumen o en la intimidad de nuestros audífonos.
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