Tal y como Lisa Crawley lo deseó, la canción hará que durante y después de escucharla, recordarás que debes conocer tu valor y ser selectivo con quiénes dejas entrar en tu vida a que la modifiquen y opinen de cierta manera de ella.
En realidad, el tema se siente como una declaración personal de valor y amor propio, un tópico difícil pero disfrazado con una melodía alegre. Desde los primeros compases, la canción establece un tono feliz y decidido, a pesar de que la letra toca algo muy cargado emocionalmente, como lo es una ruptura. La batería marca un ritmo firme, que podría interpretarse como que el instrumento con cada golpe nos alienta a decir "ya no más". Los coros vocales funcionan como energizantes y liberadores de la tristeza hacia la felicidad individual.
La letra es clara: no dejes que alguien que no lo merece, entre y se quede en tu vida; y lo que destaca de esta canción es que a pesar de tocar un tema así de sensible, no remite a la tristeza o venganza, como tal vez estamos acostumbrados, si no al empoderamiento y a la liberación.
¿Estás listo para animarte a cantar "ya basta" y perseguir lo que en verdad mereces?
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