Una canción que sin importar gustos, preferencias y restricciones, tienes que escuchar. Tiene un sonido impecable que es un gusto asegurado, e indudablemente hará que voltees a ver éste artista; y qué bueno, porque el arte de Fiann Paul, quien también es explorador y científico es totalmente asombroso.
El artista comenta que ésta pieza es como un himno a la vida misma; con bases de psicología junguiana, es decir, de profundidad ya que fue co-escrita con uno de los mejores exponentes de dicha ciencia: James Hollis, hace que sea un trabajo bastante peculiar e interesante. Siempre es grato y motivador descubrir y apoyar a artistas que vengan con propuestas novedosas y experimentales.
La melodía encaja de forma satisfactoria con la letra, el tema y la vibra general de la canción; con ayuda de la tecnología y conocimientos empíricos en la música, Fiann Paul y una energía que crece lento pero seguro manteniendo un tono tranquilo y relajante, nos otorgan un trabajo bastante interesante que no tarda en poner a la vista de más personas a éste extenso y variado artista.
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