Esta es una colaboración entre el proyecto inglés llamado Ooberfuse y el cantante palestino Charlie Rishmawi quienes nos presentan el sencillo Dying Son, con un tremendo y serio mensaje que invita a la reflexión y a la completa empatía.
A través de una sentida y melancólica pista musical, los
cantantes Cherrie Anderson de Ooberfuse
y Rishmawi expresan con total emotividad y grandes matices interpretativos el
inimaginable dolor de la pérdida de un hijo. Indudablemente devastador.
Musicalmente, el tema se enclava en el electro pop, creando una
magnifica plataforma para transmitir el poderoso mensaje lírico, donde el
interesante e inusual oud (un tipo de
instrumento de cuerdas parecido al laúd) y percusiones de aire asiático, complementan perfectamente la atmósfera desoladora y lúgubre de la pieza. Y con
razón.
Definitivamente, la música se sigue reafirmando como un
refugio y remanso, así como también un vehículo para la expresión de las
emociones más profundas y sinceras de los seres humanos. Estamos aquí ante una
muestra del arte como el máximo sanador emocional.
Recomendable para absolutamente
todos. Dense la oportunidad.
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